Es importante tener en cuenta el cambio tan grande y significativo que ha dado el mundo de los entrenadores en el deporte base. Hace unos años era muy difícil ver entrenadores con los estudios de técnico deportivo en el deporte base, a no ser que te fijaras en las grandes escuelas o clubs como el Valencia, Real Madrid, Villarreal, etc
Hace 10, 20 años los entrenadores de pequeños clubs de baloncesto o fútbol no poseían estudios relacionados con el deporte al que entrenaban y no tenían los estudios de técnico deportivo. La figura de entrenador, quedaba supeditada a algún padre con ganas de llevar esa responsabilidad o algún amigo que como todos se veía con nociones de fútbol o baloncesto y, con ganas y paciencia para llevar a 16 chavales.
Como ejemplo muy clarificador, hace poco, en 2016 nos hicimos eco de los datos extraídos por la RFEF que de un total de 52421 equipos de fútbol y fútbol sala, tan solo habían sido inscritos 21952 técnicos como primer entrenador. Y hablamos de 2016 por lo que hace años era bien difícil encontrar entrenador con los estudios de técnico deportivo.
Y es que, no hace mucho, los entrenadores no poseían conocimiento técnico específico deportivo y los entrenamientos realizados por estos entrenadores, sobre todo en Fútbol, eran principalmente físicos. Lo habitual era correr, correr y correr. Centrando todo el tiempo de entrenamiento en la condición física. Ser el más veloz, el que más saltaba o el que más resistía corriendo era lo más importante, sin tener en cuenta si estas aptitudes se tenían con el balón entre los pies. Muchos de nosotros, aún recordamos cuando íbamos a entrenar y no tocábamos el balón durante todo el entrenamiento. Era desesperante y frustrante para cualquier niño de 12 o 13 años que quiere divertirse.
Ahora el momento es bien diferente, el imparable auge del fútbol y de la práctica del deporte en general en la etapa inicial de los niños, esta generando una profesionalización en el deporte de base la cual genera a su vez una mayor búsqueda, por parte de las escuelas y clubs deportivos, de entrenadores más preparados con estudios específicos de técnico deportivo.
Los entrenamientos están mucho más planificados y exigentes hacía la propia disciplina, es decir, si hablamos de fútbol por ejemplo, ahora se busca también ser el más veloz pero manejando el balón, ser el más veloz pero poniendo un buen centro en el área. Entrenando situaciones reales de juego, siempre con el balón de por medio.
Es por esto que los estudios de técnico deportivo son la solución para asegurar que los entrenadores posean unos conocimientos específicos y la posibilidad de aplicarlos